"Desquiciado" , un tesoro multimedia de Omarosa contra Donald Trump
EP New York/ agencias/ La ex consejera de la Casa Blanca Omarosa Manigault Newman no solo tiene grabaciones de audio, sino también una colección de videos, correos electrónicos, mensajes de texto y otros documentos que respaldan las afirmaciones que hizo en su libro sobre el tiempo que trabajó en la Casa Blanca, cerca del presidente Donald Trump.
Lo informó una fuente citada hoy por medios locales, según las cuales Omarosa dejó en claro que planea continuar publicando partes de la evidencia si el presidente Trump y sus colaboradores continúan atacando su credibilidad y desafían las afirmaciones que hizo en su libro "Unhinged" (Desquiciado).
Hasta el momento la ex consejera de 44 años filtró grabaciones de audio de conversaciones, pero también podrían salir a la luz pública videos, textos o correos electrónicos.
Omarosa cuenta con un verdadero "tesoro" multimedia, reveló la fuente cercana al caso, que pidió ser mantenida en el anonimato. "No me callarán. No me intimidarán. Donald Trump no me va a intimidar", aseguró Omarosa esta semana, luego que la campaña presidencial del mandatario anunció que presentó un recurso de arbitraje contra la ex colaboradora, acusándola de violar un acuerdo de confidencialidad.
El presidente Trump calificó esta semana de "perra", "escoria" y "demente" a su ex asesora en la Casa Blanca Newman había saltado a la fama en el reality show de Trump, "The Apprentice", y luego consiguió un trabajo de 180.000 dólares al año en la Casa Blanca. La mujer que en ese entonces era la mayor defensora de Trump entre la población negra, se convirtió de pronto en su peor pesadilla, luego que difundió la grabación de una conversación privada que mantuvo con el presidente en la Sala de Crisis de
la Casa Blanca tras ser despedida.
Newman, de 44 años, se ha embarcado en la última semana en una despiadada ofensiva de consecuencias impredecibles contra Trump. Le ha acusado de ser racista y sufrir un declive mental que le incapacita a ser presidente de Estados Unidos. Ha difundido al menos cuatro grabaciones secretas del mandatario o personas de su entorno.
Ha amenazado con tirar de la manta para destapar la “corrupción” en la Casa Blanca. Ha revelado una presunta oferta para silenciarla de la campaña a la reelección del republicano. Ha asegurado haber hablado con Robert Mueller, el fiscal especial que investiga la injerencia electoral rusa.
Trump, que en el pasado le dio trabajo y acceso permanente al Despacho Oval, la ha llamado “perra”, “escoria” y “chiflada”. Su campaña la ha demandado por romper un presunto acuerdo de confidencialidad. Y los nervios están a flor de piel entre los trabajadores de la residencia presidencial.